Tendencias del futuro de la alimentación

En un mundo que cada vez tiene menos recursos naturales y una población que no deja de crecer y explotarlos es necesario evolucionar nuestra manera de vivir para asegurar un futuro.

Poco a poco la población se ha vuelto más consciente de cómo su consumo de alimentos impacta al planeta y a los seres vivos que lo habitamos, es por eso que la industria alimentaria está esforzándose para cumplir con estos requisitos innovando en nuevas formas sostenibles de alimentarnos que respeten todas las formas de vida y disminuyan el impacto ambiental.

Según estimaciones de la ONU se espera que para el 2050 seamos 10,000 millones de bocas que necesiten ser alimentadas, lo cual indica que la producción de alimentos deberá aumentar un 70%.

Nuevas alternativas

Actualmente la industria alimentaria, los científicos y los emprendimientos de innovación y tecnología están haciendo equipo para ofrecer diferentes alternativas para el futuro.

Según un artículo de El Economista en España, sobre el futuro de la alimentación, Juan Ignacio Álvarez destaca 3 fuertes contendientes como nuevas alternativas: los insectos, las algas y la comida 3D.

Una de las alternativas más fuertes para consumir proteína es la alimentación a base de insectos. Expertos apuestan por esta opción ya que cumple perfectamente con los requisitos ambientales y de salud.

De acuerdo a la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) los insectos son ricos en proteínas, fibra y micronutrientes como cobre, hierro, magnesio, fósforo, selenio y zinc. Además de contener niveles elevados de ácido graso los cuáles son muy importantes para combatir la desnutrición.

Por otro lado, los insectos utilizan mucho menos agua comparado con el ganado tradicional y las crías dependen menos de la tierra que la actividad ganadera, mejorando así el impacto al medio ambiente.

También son una excelente opción para los lugares con menos recursos ya que, tanto su cría como recolección, no necesita inversiones importantes. De hecho, actualmente ya son parte de la dieta de millones de personas alrededor de Asia, África y América Latina.

Otra alternativa que se ve prometedora como una fuente de proteína vegetal son las algas. Las algas y microalgas están llenas de lípidos, proteínas y carbohidratos. De hecho, actualmente ya se utilizan sus beneficios nutricionales en suplementos alimenticios, lo cual se espera que en el futuro se convierta en un ingrediente más en nuestra cocina.

Consumir algas ayuda al medio ambiente ya que le da un respiro a toda la explotación de recursos terrestres que ya se lleva a cabo, sin dejar de ser un recurso natural. Empresas como Unilever ya se encuentran trabajando para agregar este alimento como uno mas de sus productos para satisfacer la demanda de las personas que han decidido dejar de comer carne de animales.

En este panorama la opción de alimentación más innovadora en la que se está trabajando es la de crear alimentos impresos en 3D, que como explica Juan Ignacio en su artículo, “consiste en la creación de modelos y estructuras tridimensionales, mediante diferentes técnicas de inyección o extrusión”, lo cual permite una producción de alimentos diseñados para ser más sostenibles al mismo que tiempo que cumplan con las demandas personalizadas de los consumidores.

Estos alimentos están siendo diseñados para contener nutrientes como proteínas, carbohidratos y ácidos grasos. Actualmente ya podemos ver los primeros resultados de esta tendencia, pero se espera que crezca mucho más.

No cabe duda que somos capaces de hacer grandes cosas cuando usamos la tecnología y la innovación para beneficiar a todos.

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